Como todo experto o simple amante de las artes gráficas bien sabe, resulta difícil trasmitir a través de un medio digital el resultado estético de un grabado, cuya naturaleza y belleza reside en la misma materia. Por eso, nos limitaremos principalmente a exponer las ventajas “formales” de nuestra técnica y las acompañaremos con fotografías sin pretender que las mismas puedan ser un reflejo fiel del resultado impreso en papel.
Principales características y ventajas de nuestro procedimiento con planchas de fotopolímeros con respecto a otros métodos de reproducción fotomecánica o química:
(Escáner de estampación de fotograbado en papel de algodón)
La precisión y nitidez de la imagen es totalmente comparable con las que se consiguen con métodos químicos de revelado e impresión fotográficas o con plotters, incluso llegando a mejorar el enfoque en la impresión.
La obra original puede estar en formato analógico o digital (escaneado de alta definición) abriendo la posibilidad de reproducción de una infinidad de formatos artísticos (fotografías, dibujos, monotipias…) y facilitando su entrega al taller.
(Escáner de estampación de fotograbado en papel de algodón)
Tiene una mayor capacidad que el heliograbado al grano para traducir las sutiles gradaciones tonales de la fotografía sin corte alguno gracias a su grano extremadamente fino. A la vista e incluso con cuentahílos, estamos probablemente delante de la técnica fotomecánica con mayor capacidad de imitación de un tono continuo. Ofrece gran profundidad en las sombras, negros profundos y cálidos (típicos de las tintas empleadas en las técnicas de grabado), incomparables con los de cualquier otro procedimiento de impresión fotomecánico.
Tanto por su capacidad de enfoque, de reproducción de detalles, así como de reproducción de tono continuo (amplia gama de gradaciones tonales), nuestra técnica abre el campo a una infinidad de expresiones estéticas, antes de imposible alcance mediante otros métodos de estampación de grabados/fotograbados.
50X luces
50X zonas medias
50X oscuras
El proceso de reproducción de la imagen fotográfica resulta más estable en comparación con las técnicas de impresión con sales de plata. La imagen se imprime sobre un papel de trapo con un pH neutro y las tintas utilizadas están basadas en pigmentos naturales y aceite, dando a la estampa mediante esta técnica una de sus ventajas mayores de cara a la conservación y el coleccionismo: la sostenibilidad o perdurabilidad en el tiempo.
Las planchas de fotopolímeros empleadas presentan un proceso de limpieza extremadamente sencillo y no sufren deterioros significativos durante la estampación: el resultado, junto con otras características como la estabilidad de las tinas utilizadas, permiten la realización de largas ediciones en las que cada ejemplar es idéntico a los demás.
En cuanto a la estampación en color, cabe destacar dos factores fundamentales. El primero, referido a la facilidad de registro que estas planchas ofrecen en los procesos de sobreimpresión. El segundo, relacionado con la reacción típica del soporte con el color. Hay que añadir que ningún color reacciona en contacto con la superficie de la matriz. Por ello, a diferencia de las planchas metálicas empleadas en el heliograbado, la plancha de fotopolímero resulta un soporte más idóneo también para la estampación policromática.
En comparación con las demás técnicas de reproducción de fotograbados, el uso de planchas de fotopolímero supone un impacto medioambiental muy reducido así como niveles de toxicidad prácticamente nulos: la matriz solamente se construye con luz y agua!
